damos vida sólo a lo que odiamos (a que sí, ¿verdad?)

destino

Matamos lo que amamos. Lo demás
no ha estado vivo nunca.
Ninguno está tan cerca. A ningún otro hiere
un olvido, una ausencia, a veces menos.
Matamos lo que amamos. ¡Que cese ya esta asfixia
de respirar con un pulmón ajeno!
El aire no es bastante
para los dos. Y no basta la tierra
para los cuerpos juntos
y la ración de la esperanza es poca
y el dolor no se puede compartir.

El hombre es animal de soledades,
ciervo con una flecha en el ijar
que huye y se desangra.

Ah, pero el odio, su fijeza insomne
de pupilas de vidrio; su actitud
que es la vez reposo y amenaza.

El ciervo va a beber y en el agua aparece
el reflejo de un tigre.

El ciervo bebe el agua y la imagen. Se vuelve
-antes que lo devoren- (cómplice, fascinado)
igual a su enemigo.

Damos la vida sólo a lo que odiamos.

rosario castellanos

No hay comentarios:

¿qué es p o e m a t r i z?

un festival de versos aptos para toda ocasión

un carnaval carioca para el espíritu

una soga donde colgar los poemas como la ropa al sol

un lago donde arrojar las piedritas de nuestros versos irreverentes

una denuncia permanente del error en el que vivimos

un tónico, un bálsamo contra la injusticia y la fealdad

un mentís a los mercaderes del saber (y a los otros también)

un corte de manga a los poeñoños

un de acá a los que suponen que la poesía es corazoncitos arriba de las íes

un gusto, un lujo, un placer, una panzada de hedonismo al alcance del teclado

una sarta infinita de las más variadas perlas

un regalo, un don de los dioses y las musas

un femenino aporte a la masculina confusión general

una brisa del paraíso

una hoja del otoño

un golpe seco en la superficie dormida de las cosas

una caricia, un abrazo, una palmadita en la espalda

un basta a la mediocridad

un rotundo sí al amor

un definitivo no a la muerte

en definitiva

un tajo, una herida, un túnel, un río, un canal, un parto, una luz, un discurso, una música, un deseo, un estertor, un ay, un hilo, Ariadna, un poema, bah