quién no clavó un puñal
en el corazón de otro
y arrancó con tenazas sus uñas
y rebanó sus músculos
despedazó sus nervios y sus venas
tajeó su piel
cercenó su abdomen y su sexo
tronchó sus ojos
quién no despellejó y mutiló a otro
quién no abrió nunca
una cicatriz profunda
imposible
quién está tan vacío
como para no atreverse a herir
irremediablemente
karina sacerdote
Terapia intensiva (en prensa)
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